Pico de Rayo (desde Aluenda) 1420 m.

Domingo, 27 de diciembre de 2009

Distancia: 16,7 km.

Dificultad: fácil-moderada (por las últimas pendientes)

Tiempo: 2:40 andando, 55 min parados y almorzando Total 3:35

Desnivel: 650 m.

Excursionistas: Lapi y José Carlos, y Roberto Pellicer a última hora.


El sábado 26 de diciembre tras reponernos de los excesos navideños, quedamos el Lapi y yo para subir al Pico del Rayo desde Aluenda, excursión que el Lapi ya había hecho, pero al llegar a Aluenda la lluvia y la densa nube que cubría toda la subida nos hizo darnos la vuelta, irnos almorzar y posponerlo, a nuestro pesar, para el domingo.


El domingo amaneció frio y despejado, un perfecto día de invierno para irnos a andar. A las 8 salíamos de La Almunia y coincidimos con los amigos de los muñecos andarines, que tenían almuerzo navideño en el primer refugio, el de la Fuente Genaro, desde Aluenda, parte de ellos subían andando y un par llevaba el almuerzo en 4x4 a la caseta y preparaban la lumbre, ellos sí que se lo saben montar bien jeje. Roberto, que vino en una ocasión con nosotros, le gusto nuestro plan y se vino hasta la cumbre para reengancharse después al almuerzo.

Así pues a las 8:30, tras dejar el coche en al aparcamiento de Aluenda nada más pasar la vieja gasolinera, comenzábamos a andar los 3. Se me olvidaba, a Aluenda se llega por la AII dirección Madrid, nada más pasar el cruce de El Frasno. En el pueblo encontraremos ya la señal de la G.R. 90.2 dirección Viver de Vicort, la cual será nuestra principal vía de hoy, perfectamente marcado todo el recorrido por franjas rojas y blancas.


La excursión comienza saliendo del pueblo por una pista que a los 150 m se convierte en senda tomando siempre el desvío de la izquierda, hay un par de caminos perfectamente señalizados como explotaciones agrícolas, sobretodo cerezos, que no debemos tomar. La senda transcurre por un impresionante carrascal, está muy bien pisada, es una subida constante con algunos zigzag de mayor pendiente, oímos el viento soplar, pero esta cara Norte nos protege de él. Al final de la senda la carrasca se mezcla con encinas que dan paso al vivo pinar de las cotas más altas de esta sierra. La senda desemboca a una pista que sube desde El Frasno, en el collado de La Erilla, seguiremos a la derecha continuando por las marcas de la G.R. Este primer tramo nos cuesta unos 40min.


Ya en la pista y con el nuevo repetidor enfrente, continúa la subida más moderada, pero en pocos metros hay unos zigzag con más desnivel que atraviesan la carretera militar que sube al repetidor. Justo en este punto el camino llega al cruce con la subida a la Nevera de la Erilla Alta, a la cual no subimos, y se abre en este collado llamado El Puerto a la cara Sur, la imagen es heladora, los pinos en la cara Sur están blancos por el frío y el agua del día anterior, el aire viene helado y pensamos lo que nos espera en la cumbre, pasamos rápidos los zigzag y volvemos al resguardo de la pista que continua por la cara Norte.


Este tramo, tras pasar la carretera militar, es prácticamente llano. Nos encontraremos primero con el refugio de Fuente Genaro a la izquierda del camino, objetivo de los muñecos andarines, y más adelante con el refugio de La Caseta Blanca de Inoges, para llegar a la base de la cumbre del Pico del Rayo, este tramo nos cuesta unos 45-50 min. Desde La Caseta Blanca de Inoges, la excursión coincide con la subida desde Inoges, así que os remito a ella para las explicaciones.


La subida final ya la conocíamos, un pechugazo de los buenos, además cubierto por dos dedos de escarcha y zonas sombrías con las piedras totalmente heladas que le daban una mayor dificultad a la subida. Roberto y El Lapi pillan su ritmo y yo el mío jeje. En la cumbre un aire helador y todo cubierto por dos dedos de hielo, echamos unas fotos entre nubes y ráfagas de aire y sin perder mucho tiempo bajamos. El Lapi y Roberto se tiran deprisa lo que les cuesta besar el suelo con el culo un par de veces, yo y mis rodillas nos lo tomamos con más filosofía y seguridad. La mañana invitaba andar y no somos los únicos nos cruzamos con varios excursionistas por la cumbre.


Ya regresando por el mismo camino, comentamos la bella imagen con la bola del repetidor, solo blanca por una cara, y el Moncayo al fondo cubierto de nieve, volvemos a buen paso, ya que nos anima que en el refugio de la Fuente Genaro nos espera el almuerzo.


A pocos metros del refugio ya huele a brasas, entramos en el refugio donde nos envuelve el olor a una parrilla de chorizo y longaniza recién hecha. Agradecer de nuevo a los amigos de los muñecos andarines el generoso almuerzo que se curraron y el buen rato entre vinos, chorizo y risas que pasamos. El brindis con champan no podía faltar, lleno de buenos deseos y para que el año que viene estuviésemos todos allí de nuevo. El Lapi y yo tras tomar un revitalizante café emprendemos la marcha. Bajamos tranquilamente contemplando las maravillosas vistas y digiriendo el almuerzo por el mismo recorrido.


Bueno, como siempre os animo y hasta la siguiente… Que ya será al año que viene. ¡Feliz Año ¡


FOTOS DE LA EXCURSIÓN PINCHAR AQUÍ

Los Galachos de Juslibol


Distancia total: 5 Km aprox

Dificultad: Muy Facil

Tiempo: 1 h ida y vuelta.

Excursionista: Diego

La excursión de hoy es más un paseo matinal que otra cosa. Como sigo con la rodilla inestable, tenía muchas ganas de salir y además, aun no tenemos entrada de diciembre; he decidido inaugurar este mes con un modesto pero bonito paseo. Esta vez he dejado el coche en la barrera que corta el paso a los turismos, como ya anduve por estos caminos cuando me acerqué hasta el castillo de Miranda por la parte alta de los acantilados, no volveré a escribir cómo se llega hasta aquí. Hoy no me he entretenido en ningún panel informativo ni he entrado al centro de interpretación. Eso ya lo hice la vez anterior. He ido directamente al puente que nos adentra en los galachos por el galacho principal. En realidad el galacho original es el que nos recibe cuando lo cruzamos por el puente. Unos pasos más adentro, tenemos diferentes itinerarios: desde ir a Monzalbarba, Castillo de Miranda, hasta pasear por las lagunas que se quedan en la parte interior del galacho original. Eso es lo que he hecho, aprovechando para hacer algunas fotos otoñales. Lo cierto es que en las fotos se comprueba que sin salir de Zaragoza podemos encontrar lugares naturales muy bonitos . También resalta lo mágico de los colores del otoño zaragozano.

Pese a ser un corto paseo, ha sido agradable y esta vez la rodilla, no se me ha resentido tanto.

FOTOS DE LA EXCURSIÓN PINCHAR AQUÍ